“Es de bien nacidos ser agradecidos” es una especie de refrán o dicho popular que he escuchado en bastantes ocasiones y que traigo aquí para que sirva de base a esta reflexión.
Internet, esa fabulosa fuente de contenidos que prácticamente nos pone todo al alcance de un clic, no existe por arte de birlibirloque sino que los contenidos están ahí porque muchas personas dedican su tiempo y su esfuerzo a crear, digitalizar, copiar, etc. dichos contenidos y habilitarles un espacio para que todos podamos acceder a ellos.
Por lo tanto, aunque estemos hablando de contenidos gratuitos en la mayoría de los casos, eso no implica que sean carentes de valor (valor y precio no son la misma cosa).
Si buscamos algo que necesitamos, seguramente es porque eso tiene un cierto valor para nosotros … qué menos que ser agradecidos con quien lo ha puesto a nuestra disposición porque, ¿el hecho de que sea gratuito o de pago le resta el valor y el interés inicial?
Es más, si fuera necesario pagar por esos contenidos, seguramente muchos no podrían acceder a los mismos y se quedarían sin ellos. Por eso, en contra de lo que parece ser común, en igualdad de condiciones los contenidos gratuitos tienen un valor superior a los de pago por el hecho de ser accesibles a todo el mundo.
Veo en foros y blogs que, muchísimas veces, se hacen consultas sobre diferentes problemas. A veces se pueden ver preguntas que parecen ser hechas por personas realmente preocupadas por el problema que exponen y, curiosamente, también veo que en muchísimas ocasiones, una vez contestadas dichas preguntas, los consultantes ni se dignan a hacer un simple comentario -sobre todo si les ha ayudado la respuesta- que diga sencillamente: “gracias”.
Las personas que responden a nuestras preguntas, también son personas que desinteresadamente dedican una parte de su tiempo a leer la consulta, pensar y/o documentarse para la respuesta, y escribir su conclusión. Han dedicado un cierto tiempo y esfuerzo a nuestro problema, a nuestra persona … ¿no es ese un motivo suficiente para mostrarles nuestro agradecimiento?
Además, si también aportamos nuestras contra-respuestas estaremos enriqueciendo el foro o blog y ayudando mucho más a que otras personas que en el futuro tengan algún problema similar al ya tratado encuentren soluciones sin necesidad de volver a punto inicial de tener que dedicar, otra vez, tiempo y esfuerzo para resolver la consulta.
Deberíamos pensar que, aunque no se vea, detrás de cada cosa que aparece en la red hay personas que lo hacen posible y que, como estamos tratando con personas -y su tiempo es, como mínimo, igual de valioso que el nuestro-, aplicar ese dicho de “es de bien nacidos ser agradecidos” seguramente ayudará a conseguir que Internet, como prolongación de nuestro propio mundo, sea también un sitio más humano y beneficioso para todos.
Convendría no perder de vista esta reflexión ;-)